A pesar de la intervención gubernamental para tratar de mantener el dólar en 22.20 pesos como cerró el pasado viernes, no de pudo evitar una nueva subida cerrando este lunes en 22.33, aunque en algunos momentos se negoció 22.91, mientras el gobierno del presidente argentino, Mauricio Macri, continuaba buscando una estrategia para encubrir la situación, más que para dar una solución que no encuentra, mientras crecen rumores y descontentos y los sindicatos y centrales sindicales, hablan ya de la posibilidad de un paro nacional.
Después de una reunión con Macri, referentes de la alianza Cambiemos especialmente de la dividida Unión Cívica Radical (UCR) reconocieron que no están solucionadas las razones que provocaron la suba del dólar y admitieron que si bien Cambiemos no logró los objetivos buscados, igual mantendrá sus políticas y ratificó el rumbo en materia económica y social.
Por su parte, el Banco Mundial actualizó los datos de Argentina con las revisiones del nuevo Instituto Nacional de Estadística y Censo (Indec) y de acuerdo a un informe que reúne los números de la distribución de los ingresos junto a la producción total, desde 2003 coincidiendo con la llegada de Néstor Kirchner a la presidencia, los resultados determinan- entre otro datos- que el período de mayor producción de riqueza y de menor desigualdad fue la segunda presidencia de Cristina Fernández de Kirchner (2011-2015), y se pudo establecer que con la llegada de Macri al gobierno en 2015, aumentó el índice de desigualdad y hubo una menor producción de riqueza.
Más importante señala que a partir de 2003, coincidiendo con la entrada de los Kirchner en el poder - así como en Brasil con la llegada Luiz Inácio Lula da Silva–, el país crece económicamente y baja la desigualdad de manera sistemática y sin precedentes (excepto por un retroceso coincidiendo con la crisis financiera global), señala El Destape.
El tema del dólar está llevando a una estampida de inversores, ya que en dos semanas subió de 20.50 hasta el récord de 23.30 (13.7 por ciento) del jueves pasado y todo indica que la situación tiende a agravarse, al conocerse que el peso argentino fue la moneda que más de devaluó en el mundo.
El viernes pasado, el gobierno anunció más ajustes y un mayor recorte fiscal y el Banco Central subió la tasa de referencia en 40 por ciento y exigió que los bancos se desprendieran de 20 por ciento de sus dólares y aunque logró una baja, la percepción en el exterior tanto de inversores e importantes medios de comunicación indican que Macri no logra convencerlos y advierten sobre situaciones muy difíciles en el corto plazo.
Argentina se encuentra ahora en primera línea de una posible crisis en los mercados emergentes, tituló este domingo el periódico británico The Sunday Times, coincidiendo con el Financial Times y otros ya citados en este periódico la semana anterior
También la calificadora de riesgo estadounidense Moody’s, advirtió que el reciente debilitamiento del peso refleja una mayor percepción de riesgo para activos argentinos y que las empresas argentinas afrontan también un alto riego por falta de liquidezdebido a que este año y el próximo tendrán que fondear un monto significativo de deuda y se estima que la situación probablemente empeorará hasta mediados de 2019.
En Argentina, los medios masivos adictos y socios del gobierno como el Grupo Clarín, La Nación y otros tratan de ocultar y minimizar la situación, a pesar de lo cuál, no logran desactivar el esquema de comparación con el fatídico diciembre de 2001. La realidad está en las calles, en los supermercados y negocios, donde el consumo sigue disminuyendo, mientras las cifras de la pobreza y la indigencia ya no pueden esconderse. Miles de familias están en las calles. No se pueden pagar alquileres ni tarifas. Es la comida y la sobrevivencia en condiciones onerosas lo que pueden elegir.