Andrés Manuel López Obrador dijo que el Gobierno capitalino sí entregó un contrato para la cimentación de los segundos pisos a Manuel Rioboó, pero porque su empresa es la única con la especialidad en ese tipo de obras.
Además, el contrato se auditó y el fideicomiso lo administró Banobras, entonces dirigido por Felipe Calderón, afirmó.
"No tengo de qué avergonzarme, por eso repito que me pueden llamar peje, pero no soy lagarto", dijo en entrevista posterior a una concentración en este municipio, antes de viajar a Quintana Roo.
"No hay absolutamente nada chueco" en el contrato, abundó.
Aclaró que el segundo piso de la Ciudad de México ya formaba parte de un proyecto durante la administración del ex regente Manuel Camacho Solís, aunque la idea original preveía el cobro de peaje a los usuarios.
Defendió que Rioboó es un especialista en la cimentación y afirmó que "es tan bueno", que cuando se privatizó el segundo tramo del segundo piso, la empresa OHL también lo contrató.