Pekín anunció el viernes aranceles sobre la importación de bienes estadunidenses valorados en 60.000 millones de dólares, en ítems desde gas natural licuado (GNL) hasta determinadas aeronaves, y advirtió de más medidas, señalando que no dará pie atrás en su conflicto con Washington.
El Ministerio de Comercio chino presentó una nueva propuesta de aranceles sobre la importación de 5.207 bienes estadunidenses, con gravámenes que van desde 5a 25 por ciento.
El momento para la implementación de las nuevas tarifas sobre los productos estadunidenses dependería de las acciones de Washington, afirmó la cartera en un comunicado.
El miércoles, Estados Unidos anunció que estudiaba subir los gravámenes a un 25 por ciento sobre bienes importados chinos con un valor de 200.000 millones de dólares. Pekín prometió el jueves que tomaría represalias, al mismo tiempo instando a Washington a volver al diálogo.
En julio, Washington impuso aranceles del 25 por ciento a 34.000 millones de dólares de exportaciones chinas, y Pekín respondió con gravámenes por la misma cantidad a envíos estadunidenses. Estados Unidos pronto aplicaría más tarifas sobre 16.000 millones de dólares en productos chinos, mientras que Pekín ya anunció que los igualará de forma inmediata.
Entre los productos estadunidenses a los que se aplicarán los aranceles hay un amplio rango de bienes agrícolas y de energía, como carne vacuna y GNL, además de semiconductores, algunos helicópteros, aeronaves pequeñas a medianos, condones, productos de acero y café.