A tres días de iniciada la contingencia derivada de la ruptura del bordo en el margen izquierdo del Río Lerma, se logró concluir el dique para cerrar la fisura de 15 metros de longitud que sufrió el afluente, mediante encostalado de arena y piedras.
Lo anterior, mediante un trabajo coordinado entre elementos del Ejército Mexicano, empleados del ayuntamiento y ciudadanos de San Mateo Atenco, con la supervisión de autoridades de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Comisión del Agua del Estado de México (CAEM).
La segunda etapa de estos trabajos, consiste en la reparación del bordo artificial; entre tanto, se espera que en aproximadamente 48 horas baje el nivel de agua que se registra al interior del municipio, con el trabajo de bombeo.
Sin embargo, derivado de la lluvia ocurrida la noche del domingo, la inundación aumentó su mancha, afectando un total de 2 mil viviendas, 5 mil personas y 200 hectáreas de cultivo.
Por lo anterior, el ayuntamiento de San Mateo Atenco dispuso de tres albergues más, llegando a un total de cinco ubicados en: la Casa de Cultura, la parroquia de San Mateo, en la capilla de San Lucas, en la capilla de San Pedro y en la capilla de Guadalupe.
Aunado a ello, el DIF municipal, a través de seis brigadas, distribuye 6 mil raciones diarias de desayunos, comidas y cenas para los damnificados.
La sede del DIF municipal (Matamoros 308, Barrio de la Concepción) es el centro de acopio para recibir: agua y alimentos no perecederos; material de curación y medicamentos como paracetamol y antigripales; productos de limpieza, botas, cubre bocas y guantes.
El Gobierno del Estado de México ha brindado apoyo a través de ocho unidades móviles del DIFEM, 30 baños móviles habilitados, así como 85 integrantes del sector salud, entre médicos, enfermeras y administrativos, distribuidos en 14 brigadas que ofrecen consultas médicas.
