Donald Trump indicó en mensajes de Twitter que para él es más importante la seguridad que el comercio y amagó con cerrar frontera sur.
Los miles de migrantes que se movilizan desde Honduras, El Salvador y Guatemala podrían encontrar la frontera sur de Estados Unidos cerrada, según amenazó el presidente Donald Trump, esta mañana.
En una serie de mensajes a través de Twitter, Donald Trump acusó a los demócratas de querer abrir las fronteras de Estados Unidos para “criminales”, así como de portar armas y drogas.
“Estoy viendo al partido demócrata liderando (porque quieren fronteras abiertas y leyes débiles) el asalto a nuestro país por Guatemala, Honduras y el Salvador, cuyos líderes están haciendo poco para detener este gran flujo de gente, INCLUYENDO MUCHOS CRIMINALES, de entrar a México a Estados Unidos”, escribió.
“Además de detener todos los pagos a estos países, que parecen no tener casi ningún control sobre su población, debo, en el más fuerte de los términos, pedir a México que detenga este ataque, y si no puede hacerlo, llamaré al ejército de los Estados Unidos y ¡CERRAREMOS NUESTRA FRONTERA SUR!”.
En su tercer mensaje de la mañana, Trump indicó que es más importante para su gobierno detener el “asalto” que tratan de llevar a cabo los miles de migrantes, que el comercio.
Estas declaraciones fueron precedidas por amenazas previas a los gobiernos de Centroamérica.
“Hemos informado a Honduras, Guatemala y El Salvador que si permiten que sus ciudadanos viajen a través de sus fronteras hacia los Estados Unidos, con la intención de entrar ilegalmente a nuestro país, todos los pagos les serán detenidos”, escribió en Twitter, hace días.
La actitud de Donald Trump contrasta con las declaraciones de Andrés Manuel López Obrador, presidente electo de México, quien indicó que una vez que entre al gobierno, dará visas de trabajo a los miles de migrantes que pasan por el país.
“Nosotros estamos planteando al Gobierno de Estados Unidos y al Gobierno de Canadá la implementación de un plan de desarrollo en México y en los países centroamericanos, estamos haciendo una propuesta de cooperación para el desarrollo”, dijo AMLO desde Tamaulipas.
“Se trata de dar opciones, de dar alternativas, de que quienes salen de sus pueblos tengan oportunidades de trabajo. Nosotros en México, a partir del 1 de diciembre, vamos a ofrecer empleo, trabajo a migrantes centroamericanos, ese es un plan que tenemos”.
El gobierno de Peña Nieto, insistió en que los migrantes centroamericanos que pasen por el país deberán tener documentos de viaje en orden o serán procesados.
“El personal de migración deberá revisar el cumplimiento de los requisitos que marca la ley, y a quienes no los cumplan, no se les permitirá el ingreso”, dijo el Instituto Nacional de Migración (INM) en un comunicado.
“La ley no prevé permisos para acceder al país sin cumplir con los requisitos y posteriormente dirigirse a un tercer país”.
Mientras tanto, fuentes de seguridad mexicanas informaron que policías federales y agentes del INM reforzarán la seguridad y vigilarán la entrada de personas que pretendan ingresar al país sin documentos.
“En cumplimiento de la legislación nacional vigente, toda persona que ingrese al país de manera irregular, será rescatada y sujeta a procedimiento administrativo y, en su caso, será retornada a su país de origen, de manera segura y ordenada”, señalaron la SRE y la Segob en un comunicado.
La postura del gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, es contradictoria con la del gobierno federal, pues indicó que dará libre paso a los migrantes por su entidad.
“Vamos a apoyar a los migrantes, a nuestros hermanos hondureños, guatemaltecos o de donde vengan”, dijo Velasco Coello a la prensa, al término de un acto público.
“Vamos a tener siempre una política de respeto a los derechos humanos de los migrantes, de puertas abiertas, porque debemos de tener la cara limpia para exigir el mismo trato para nuestros connacionales que viven en Estados Unidos”.
Esta caravana de migrantes, salió el pasado sábado 13 de octubre de San Pedro Sula, Honduras, con al menos 2 mil personas.
Los hondureños comenzaron la caminata hacia la frontera con Guatemala para llegar a Estados Unidos, una ruta de 2 mil kilómetros, y piden seguridad para hacer el viaje.
La comitiva, lleva a muchas mujeres con niños en brazos, algunas de ellas aseguraron que si migran no es por gusto sino por el clima de violencia de sus lugares de origen.
Los viajeros están siendo recibidos por al menos siete albergues en la zona fronteriza de Chiapas, algunos instalados por el gobierno y otros que en general trabajan en la zona.