Un avión de la Policía Federal partió de la base aérea militar número 12 de Tijuana con un centenar de centroamericanos a bordo, los cuales solicitaron el retorno asistido al Instituto Nacional de Migración.
La aeronave partió alrededor de las 11 horas tiempo local, con destino a la Ciudad de México, desde donde los centroamericanos serán devueltos a su país de origen vía terrestre.
Para ellos se cierra el capítulo de una historia que comenzó hace casi 2 meses cuando partieron de su natal Honduras y El Salvador junto con miles de compatriotas más que conformaron la Caravana Migrante.
Pero en Tijuana se dieron cuenta que el cruce no sería fácil. Se encontraron atrapados entre el muro, la negativa de Trump a brindarles el asilo solicitado y el rechazo de los tijuanenses que vieron en ellos un peligro para la estabilidad de su ciudad y de su frontera.
Según registros oficiales del gobierno municipal de Tijuana, hasta la noche del lunes 26 de noviembre, en el albergue de la unidad deportiva "Benito Juárez” había 5 mil 851 migrantes; entre ellos 3 mil 754 hombres, mil 74 mujeres, 525 niños y 498 niñas.