Mesut Özil (30) se ha visto envuelto en una nueva polémica en Alemania por tener un nuevo gesto con el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, menos de un año después de que posara junto a él en una fotografía que desató una tremenda controversia y que terminó provocando que el pasado mes de julio anunciara su decisión de abandonar la selección alemana de fútbol.
En ese momento, el centrocampista alemán de origen turco confesó sentirse víctima del racismo y aseguró que volvería a fotografiarse con él porque para él no tenía "nada que ver con la política, sino con el respeto hacia el máximo cargo del país de mi familia". Ahora, Özil no solo ha vuelto a posar con Erdogan, esta vez con su prometida (la modelo y exMiss Turquía Amine Gulse, de 25 años) en el aeropuerto de Estambul, sino que también le han invitado como testigo de honor de su boda según ha trascendido este fin de semana.
Nueva polémica y aluvión de críticas, también de políticos alemanes
Alemania y Turquía han vivido en estos últimos años un clima de tensión por algunas cuestiones de derechos humanos y esta invitación de Özil a Erdogan ha vuelto a situar al futbolista en el foco de la polémica dentro del país germano con críticas que han llegado incluso desde la cancillería alemana.
"Evidentemente esto nos entristece, cuando alguien que ha llevado durante tanto tiempo la camiseta del equipo de Alemania, y que tuvo que encarar la reacción de la opinión alemana después de su primer encuentro con Erdogan, y que esto acabe de esta manera, es decepcionante para los seguidores de fútbol, para mí también", ha declarado Helge Braun, jefe del gabinete de Angela Merkel con rango de ministro, en una entrevista para el diario 'Bild'.
Braun también ha señalado que "se trata de una decisión privada que debemos aceptar", pero ha apelado a que Özil es un modelo a seguir cuestionando también el papel de los internacionales alemanes.
"Los futbolistas son figuras simbólicas de nuestra sociedad con quienes la gente se identifica mucho más que con los ministros. Lo que lleva a esta pregunta: ¿hasta qué punto quien lleva la camiseta nacional se siente alemán?", se ha preguntado el jefe de la cancillería alemana.
Estas declaraciones de Braun han llegado poco después de que el político alemán y copresidente del partido Alianza 90/Los Verdes Cem Ozdemir, de origen turco al igual que Özil, también comentara a 'Bild am Sonntagque' que encuentra "inapropiado" que el futbolista haya invitado a su boda a Erdogan.
"Los antiguos y actuales jugadores de la selección son ejemplos. Deben preguntarse si están a la altura de ese papel cuando se entregan a autócratas, que se enriquecen a expensas de su país y hacen desaparecer a los disidentes en agujeros", comentó Ozdemir.
Además, Özil también ha recibido críticas de otros políticos alemanes. Por un lado del miembro del Partido Democrático Liberal Alexander Graf Lambsdorff, que ha indicado que su boda es un asunto privado pero que es una estrella mundial por lo que "es una pena desde un punto de vista político". Y por otro de la secretaria de estado del partido Socialdemócrata de Alemania en Berlín Sawsan Chebil, de origen palestino, quien también lo ha calificado como una decisión "irresponsable" teniendo en cuenta que es "un modelo a seguir para millones de jóvenes".