La policía británica sacó por la fuerza a un desaliñado y barbudo Julian Assange, fundador de WikiLeaks, de la embajada de Ecuador ayer y lo subió a una camioneta policial, dando inicio a una batalla en las cortes para no ser extraditado a Estados Unidos, donde enfrenta cargos por la difusión de miles de documentos secretos del gobierno.
De acuerdo con su abogado, el activista corre el riesgo de ser torturado si es enviado a EU, por lo que peleará para que esto no ocurra.
El arresto ocurrió después de que Ecuador le retiró el asilo diplomático que le otorgó durante casi siete años. El presidente ecuatoriano Lenín Moreno dijo en un tuit que su gobierno tomó la “decisión soberana” de retirar el asilo diplomático a Assange por “violar reiteradamente convenciones internacionales y el protocolo de convivencia.
El canciller de Ecuador, José Valencia, expuso las nueve razones por las que su país retiró el asilo a Assange, entre ellas interferencia en asuntos internos, amenazas a Ecuador, inconsistencias en su naturalización y su estado de salud.
En Washington, el Departamento de Justicia acusó a Assange de asociación ilícita con Chelsea Manning –un exanalista de inteligencia– para penetrar en una computadora del gobierno en el Pentágono. El cargo se anunció una vez que Assange fue puesto bajo custodia.
Assange, ahora de 47años, se refugió en la delegación diplomática en agosto de 2012, después de quedar en libertad bajo fianza en Gran Bretaña mientras enfrentaba una orden de extradición en Suecia por supuestas acusaciones de agresión sexual que podrían ser reactivadas.
Assange se presentó ayer ante una corte en Westminster, donde el juez de distrito Michael Snowlo encontró culpable de violar las condiciones de su fianza. La policía dijo que Assange fue arrestado en relación con la solicitud de EU.
En el Parlamento, la primera ministra británica, Theresa May, dijo que el arresto muestra que “nadie está por encima de la ley”.
El presidente estadounidense Donald Trump dijo en respuesta al arresto que “no sabe nada sobre WikiLeaks“, a pesar de que lo elogió durante la campaña electoral de 2016.
La detención de Assange estuvo motivada por una petición de extradición de EU y una acusación de que incumplió los términos de su libertad condicional, explicó Jennifer Robinson, del equipo de defensa de Assange.
El año pasado, el Departamento de Justicia estadounidense reveló involuntariamente la existencia de un caso penal confidencial contra el activista australiano en un documento judicial. No está claro qué cargos se le imputan.
El secretario británico de Exteriores, Jeremy Hunt, dio las gracias a Moreno y dijo que Assange “no es un héroe y nadie está por encima de la ley”.
La mujer que acusó a Assange de violación pidió a la Fiscalía de Suecia que reabra el caso.
