Por: Juan Garduño
El viernes 26 de abril de 2019 se llevó a cabo la vigésima reunión de conciliación entre la UAM y el SITUAM. Ésta duró poco menos de media hora. El inicio fue ríspido. Los miembros del SITUAM abarrotaron el lugar, gritando consignas, lanzando porras contra quienes participaron en la marcha del día anterior y solicitando la presencia del rector general, doctor Eduardo Peñaloza Castro. Debido a esta situación, el secretario general de la universidad, doctor José Antonio De los Reyes Heredia, solicitó al representante sindical, c. Jorge Dorantes, condiciones para llevar a cabo la negociación. La reunión tuvo que suspenderse cerca de 20 minutos, tras los cuales se logró reanudar la mesa de negociación, ésta se limitó a señalar que la Universidad no tenía nada más que ofrecer y el sindicato se levantó de la mesa. Cabe decir que se han conciliado 32 de los 35 puntos del pliego petitorio y en relación con materia laboral se han logrado 7 acuerdos de 9 puntos.
El SITUAM se mostró inconforme acerca de la marcha promovida por profesores y alumnos el día anterior. El sindicato no quiere reconocer que la Universidad es un mosaico de voces que se manifiestan desde distintas posiciones y no necesariamente en su favor. Por esta razón, ha descalificado a estas voces, llamándolos “acarreados”, “vendidos”, “agachones”, además acusa que la marcha fue organizada por la misma institución, pues el rector general se presentó en dicha marcha (aunque sólo fue para recibir los resultados de una consulta electrónica, acerca de la continuación o no de la huelga, y no para formar parte de ella). Lo cierto es que el sindicato y parte sus afiliados no han cesado de agredir e insultar por redes sociales a quien les presenta cuestionamientos críticos, a quienes disienten de su opinión, en particular a los alumnos, que en su juventud son más propicios a caer en la provocación. El resultado es un sindicato cada vez más alejado del sector estudiantil y académico.
A casi tres meses de huelga, ésta parece tener más tintes políticos que en relación con los derechos laborales. El sindicato acusa, por diferentes medios, que el rector general gana $ 260,000.00 pesos, cuando en la página de transparencia de la UAM, éste no puede ganar más de $ 129,476.66 (http://www.transparencia.uam.mx/tabulador2018/Tabulador_de_Confianza_2018.pdf), contando las compensaciones y estímulos; además han solicitado su renuncia. Acusan la existencia de una “burocracia dorada”, que roba gran parte del presupuesto, inflando salarios de estos funcionarios, sin embargo, en la misma página de la universidad aparece cuánto ganan.
Hasta el momento, ya se considera perdido el trimestre 19-I de la universidad, con todo lo que esto implica para quienes estudian; asimismo no se han podido abrir las convocatorias de ingreso a la Universidad para los aspirantes. Los profesores se han visto afectados económicamente, teniendo que vender y/o empeñar cosas personales (autos, bicicletas), tomando empleos eventuales (como chofer de Uber), suspendiendo pagos de rentas departamentales y de servicios. Éste es el verdadero motor que los impulsó, junto con los estudiantes y otros trabajadores, a marchar por la apertura de la “Casa Abierta al Tiempo”. Como afirmó el Secretario General, la Universidad no puede ofrecer más, sin comprometer la viabilidad financiera de la institución, han dado todo lo que es posible, la decisión la tiene el SITUAM.
Por último, estas son las cifras que resultaron de la consulta en línea llevada a cabo por los profesores de la institución:
7852 registros válidos de un total de 19057.
94.6 % a favor de levantar.
3.9 % en contra.
1.5 % se abstiene.
