Estados Unidos amenazó con sanciones a países como China, India o Turquía si continúan comprando petróleo iraní al suspender la prórroga otorgada hace seis meses dentro del proceso de recrudecimiento de la presión sobre Teherán, con el consiguiente nerviosismo en los mercados globales.
“El presidente Donald Trump ha decidido no renovar las Excepciones de Reducción Significativa (SRE) cuando expiren a principios de mayo. Esta decisión busca llevar las exportaciones de petróleo iraní a cero, denegando al régimen su principal fuente de ingresos”, indicó la Casa Blancaen un comunicado.
Entre los ocho países a quienes Washington había dado una exención de 180 días que culminaba el próximo 2 de mayo se encuentran algunos de los mayores compradores de crudo iraní: China, Turquía e India. La lista la completan Corea del Sur, Japón, Taiwán, Grecia e Italia.
No habrá más exenciones más allá del 2 de mayo. Punto”, subrayó Mike Pompeo en rueda de prensa desde el Departamento de Estado.
“Si no cumplen con esto (los compradores), habrá sanciones”, advirtió sobre las consecuencias del fin de la prórroga a la compra de crudo iraní.
El anuncio de Estados Unidos agitó los mercados petroleros por el nerviosismo acerca de las repercusiones que pueda tener en el suministro mundial.
Para tratar de calmar esta inquietud, el comunicado de la Casa Blanca remarcó que “EU, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos, tres de los mayores productores de energía mundiales, junto con nuestros socios y aliados, están comprometidos a asegurar que los mercados globales están adecuadamente abastecidos”
“Hemos acordado tomar acciones apropiadas para asegurar que se cumple con la demanda global una vez todo el petróleo iraní es sacado del mercado”, explicó.
Tras conocerse la decisión, el previo del crudo de referencia global, el Brent, aumentó un 2.6% hasta los 73.87 dólares el barril.
Las autoridades iraníes respondieron que el mercado petrolero internacional “necesita el crudo iraní”.