El Consejo de la Unión Europea (UE) prolongó por un año las sanciones a Irán por las graves violaciones de derechos humanos.
El Consejo prorrogó hasta el 13 de abril de 2020 sus medidas restrictivas, según la página web del organismo.
Las medidas prevén “una prohibición de entrada en el territorio de la UE y una inmovilización de bienes, aplicables a 82 personas y una entidad”, también “la prohibición de exportar a Irán equipos que puedan ser utilizados para la represión interna y equipos de vigilancia de las telecomunicaciones”.
Las medidas, introducidas en 2011, fueron prorrogadas desde entonces cada año.
El país también se ha visto afectado por otras sanciones por sus actividades en el campo nuclear, pero tras años de negociación llegaron a un acuerdo y se liberaron de las sanciones.
Paralelamente se mantuvieron conversaciones diplomáticas entre Irán y el “E3/UE+3” (Francia, Reino Unido, Alemania y la UE + Estados Unidos, Rusia y China) acerca de la cuestión de la proliferación nuclear.
Estas conversaciones llevaron el 14 de julio de 2015 a alcanzar un acuerdo sobre un Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC). La UE participará en todo el proceso de aplicación de este plan, incluido el levantamiento progresivo de las sanciones contra el país relacionadas con el ámbito nuclear.
El 16 de enero de 2016 (fecha de aplicación), las Naciones Unidas levantaron algunas de sus medidas restrictivas en materia nuclear, conforme a lo establecido en la Resolución 2231 (2015).
Según la UE las medidas restrictivas se adoptaron como parte de un planteamiento político integrado en el que se combina la presión y el compromiso para convencer a Irán de la necesidad de respetar sus obligaciones internacionales.