Algo cambió en el nivel de juego de la Selección Mexicana. Desde la confianza y la concentración, hasta la forma de manejar el partido. Porque si bien se llevó la victoria, el Tricolor sufrió de más para imponerse a Martinica.
Con goles de Uriel Antuna (29′), Raúl Jiménez (61′) y Fernando Navarro (72′), el cuadro dirigido por Gerardo Martino despejó las dudas y se afianzó como líder del Grupo A, con tres victorias consecutivas.
No obstante, los mexicanos no estuvieron exentos de una sorpresa. Un remate al ángulo de Kevin Parsemain (56′), de tiro libre y al poste de Jonathan Orozco, dejó fríos a los aficionados en el Estadio Bank of America de Charlotte.
Y aunque pronto cayeron los tantos de Jiménez y Navarro, los de la isla volvieron a ponerse a un paso del empate con el 3-2 de Jordy Delem (84′), cuando parecían resueltas las cosas en el campo.
El malestar de Martino se reflejó en un par de llamadas de atención del árbitro, luego de reclamar a gritos jugadas en contra de su equipo.