Si usted es de los que está en contra de que nuestro vecino consiga el financiamiento para construir el muro en la frontera, seguramente estará también en contra de la decisión del “uniforme neutral”.
Aunque no lo parezca, ambas medidas tienen mucho en común. Son soluciones parciales y salidas fáciles a problemas muy complejos.
Empecemos por lo positivo en cuanto al impacto mediático que se logra al alcanzar poblaciones específicas.
El muro, para la gente conservadora y nacionalista es una manera de proteger la soberanía de Estados Unidos de América; es endurecer el paso a ilegales que actualmente ya han invadido el territorio mexicano, y cuando digo esto, estamos hablando de que la migración ha conglomerado no solo a mexicanos sino a centroamericanos, sudamericanos, africanos, árabes y dicen algunas personas de migración que uno que otro ruso se cuela ya entre los grupos multiraciales.
El muro es una protección que cualquiera pondría en el patio trasero de su residencia para resguardarse.
Evidentemente y a pesar de que tenga algo de lógica, no es del todo cierto, hay más factores que incitan a la migración ilegal y México no es el único responsable de la misma.
En el caso del uniforme, los liberales y los miembros de las comunidades LGBTTTI sienten que han ganado una batalla. Para “elles” si queremos ser correctos en términos de inclusión, el uniforme neutro es libertad de elección.
En realidad nunca se ha prohibido que las niñas usen pantalones o los niños falda, pero ¿quién querría jugar futbol usando una falda? ¿O tal vez usar pantalones con los 30 ºC en el verano de la CDMX?
Neutralidad no es libertad, para mí queda muy claro que hay una falta de definición.
Habría que tener cuidado con pedir que te traten como algo que no es lo que todos los demás sí son. Sí, justo así de congruente y lógico se define el “uniforme neutral”
¿Habrán considerado que los shorts son por ellos mismos “neutrales”? No importa quien se los ponga o de qué color sean, pero hacer alarde de un uniforme neutral, es un concepto propagandístico que no ayuda a establecer derechos.
El problema de usar una falda o un pantalón no resolverá la violencia de género, no importa el género contra el que se realicen las discriminaciones y los abusos. Machismo, feminismo extremo u homofobia tienen el mismo semillero de ignorancia.
Ausencia de género es un término que muestra una incongruencia en sí mismo.
Educación y Estado de Derecho es la única manera para proteger a todos y a todas, seré más correcta y pondré también a “todes”.
Establecer leyes claras y concisas que protejan a cualquier mexicano sin excepciones de edad, condición social, etnia y género es la clave, lo demás… es parafernalia mediática.
