La Administración Trump está buscando la manera de aumentar la deportación de familias que viven en Estados Unidos de manera ilegal.
Mark Morgan, director interino del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés), indicó que, aunque su agencia seguirá dando prioridad a las deportaciones de inmigrantes, también incluirá a las familias de indocumentados.
Se trata de quitarles incentivos para que viajen a Estados Unidos, según Morgan. A la fecha ocurre que son puestas en libertad ante la existencia de un tiempo límite para mantener en custodia a menores de edad.
En la zona suroeste de la frontera con México, las llamadas "unidades familiares" encabezan el número de detenciones desde octubre y hasta abril, según datos oficiales, pues la cifra aumentó en 35 mil 358 y totalizó 58 mil 474, un crecimiento de 152.95 por ciento.
En tanto, la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, aprobó ayer un proyecto de ley que pondría fin a la amenaza de deportación que se ha cernido por largo tiempo sobre los jóvenes indocumentados conocidos como dreamers.