Un misil lanzado por los Guardianes de la Revolución, el cuerpo de élite del Ejército de Irán, ha abatido este jueves un dron espía de EEUU en la provincia de Hormozgan, cerca del estrecho de Ormuz, según publican diversos medios iranís, entre ellos la agencia de noticias IRNA, que ha identificado al dron como un 'RQ-4 Global Hawk'.
Los Guardianes de la Revolución explican en su web que el dron "fue derribado cuando entró en el espacio aéreo iraní cerca del distrito de Kouhmobarak", en el sur del país. El Ejército de EEUU ha confirmado que un dron suyo ha sido derribado pero, a diferencia de lo que sostiene el régimen de Teherán, asegura que la aeronave volaba en el espacio aéreo internacional y no el espacio aéreo iraní".
Un portavoz oficial de EEUU citado por la agencia AP ha confirmado bajo anonimato que un misil iraní ha derribado un dron estadounidense que sobrevolaba el espacio internacional en el estrecho de Ormuz. El 'RQ-4 Global Hawk' puede volar a grandes altitutes durante más de 30 horas y captar imágenes de altísima resolución de grandes superfícies de terreno en todo tipo de condiciones climáticas.
Potencias nucleares
El incidente es un episodio más de la escalada de tensión entre Irán y Estados Unidos que se inició cuando el presidente de EEUU, Donald Trump, dio por roto el acuerdo nuclear entre Irán y la mayoría de potencias mundiales e impuso nuevas sanciones al régimen de Teherán. En esa misma línea, Trump ha asegurado en Twitter que "han cometido un gran error".
En las últimas semanas la tensión se ha incrementado a raíz de los ataques a a petroleros en el golfo de Omán y en los Emiratos Árabes Unidos, ambos perpetrados cerca del estrecho de Hormuz. EEUU y Arabia Saudí han culpado de los incidentes a Irán. El régimen de Teherán ha rechazado su implicación en estos ataques. En los últimos días, y en respuesta a las amenazas iranís, EEUU ha enviado más tropas a la zona.