Los residentes de la Ciudad de México están en peligro de quedarse sin agua, al igual que Sao Paulo y Lima, como consecuencia del estrés de sus mantos acuíferos, alertaron este día organizadores de la Cumbre de Fondos de Agua prevista en la capital mexicana el 18 y 19 de julio próximos.
Al menos 16 de las 20 ciudades de América Latina sufren estrés hídrico, sin que se tenga la capacidad para administrar y almacenar agua, dijeron los organizadores de la Cumbre, tras señalar que en la última década se han perdido más de dos mil hectáreas en las zonas de influencia de las cuencas que filtran o recargan.
El director de la Fundación FEMSA, Mariano Montero, señaló que la problemática del agua “ha rebasado a los gobiernos”, por lo que se propone una estrategia denominada “triángulo dorado”, que involucra la participación de los sectores público y privado, la sociedad y la ciencia.
Trascendió que en América Latina operan ya 24 Fondos de Agua, otros 15 están en proceso de diseño y se han conservado más de 220 mil hectáreas y movilizado más de 200 millones de dólares con unos 530 socios que han aportado recursos y promueven proyectos importantes.
Según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), de más de 600 acuíferos en el país, más del 30 por ciento está entrando en situación de estrés al extraer más agua de la que se les regresa.
Refirieron que en la Ciudad de Monterrey opera ya un Fondo de Agua que cuenta con una gobernanza financiera.
La Alianza Latinoaméricana de Fondos de Agua es un acuerdo entre el Banco Interamericano de Desarrollo (BI) , la Fundación Femsa para el medio ambiente Mundial (FMAN), con el fin de contribuir a la seguridad hídrica de América latina.
Se trata de un punto de partida, pues entre el 70 y el 75 por ciento del agua se canaliza a la agricultura. México opera con una eficiencia muy baja.