La segunda de las dos votaciones necesarias para la aprobación del texto que define el marco general de la reforma concluyó con el respaldo de 370 diputados, frente al rechazo de 124 y una abstención.
El texto aprobado prevé ahorros equivalentes a unos 251 mil millones de dólares en diez años, pero ha sido criticado por sindicatos, organizaciones sociales y los partidos de oposición, y se registraron protestas en distintos puntos del país mientras los diputados la debatían.
La primera ronda de la propuesta concluyó el 13 de julio. En ese momento, el texto principal fue aprobado por 379 votos contra 131.
El alcalde Rodrigo Maia (DEM-RJ) quiere completar la votación sobre los aspectos más destacados el miércoles y luego enviar la propuesta al Senado, destacó O Globo.
Con la reforma, el Gobierno considera acabar con un crónico déficit del sector público y liberar recursos para la inversión en áreas claves. Para lograr esa meta, el proyecto plantea una edad mínima para el acceso a la jubilación, que hasta ahora no era requisito en Brasil y que sería de 62 años para las mujeres y 65 para los hombres.