Los sonidos de las lenguas indígenas tu’un savi, otomí, mazateco y náhuatl sonaron la noche de este martes en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, considerado como el máximo recinto cultural del país.
Provenientes de algunos pueblos originarios del país, las voces de los poetas y narradores Martín Tonalmeyotl, Celerina Sánchez, Jaime Chávez Marcos y Apolonio Bartolo Ronquillo, así como de Elisa Ramírez, quien representó al castellano, fueron escuchadas por el público que asistió al Festival de las Letras Indígenas de México.
Durante el encuentro organizado por el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), además de leer sus obras, los artistas compartieron con el público la importancia de la poesía como un medio para visibilizar a las 68 lenguas indígenas que existen en el país y que se están extinguiendo.
Martín Tonalmeyotl, narrador, poeta y traductor en lengua náhuatl, señaló que la poesía es el género más bello para que otras personas conozcan las lenguas originarias del país, y a partir de ello se sensibilice sobre la importancia de su fortalecimiento y preservación.
“En México hay una situación de discriminación de las lenguas y por eso es importante que se abran los espacios, como ocurre en este festival, para darlas a conocer”, manifestó el joven originario de Atzacoaloya, municipio de Chilapa de Álvarez, Guerrero.
Su trabajo como poeta y promotor cultural ha servido para sensibilizar a la gente de la ciudad; sin embargo, consideró que hace falta llegar a las comunidades donde cada día se están perdiendo las lenguas, porque los niños ya no tienen interés en aprenderlas.
“Nosotros como gestores, promotores culturales, escritores y lingüistas, deberíamos de ir a animar a los padres de familia para que les hablen a sus hijos en la lengua. La lengua vive porque se habla, porque si deja de hablarse, muere aunque estén en festivales o en todos lados; falta llegar a esa parte importante donde cada día que pasa estamos perdiendo a más hablantes”, expuso Tonalmeyotl.