Los manifestantes en Hong Kong se mudaron en masa a un lujoso distrito comercial después de que la policía antidisturbios usara gases lacrimógenos para despejar un área que ocupaban anteriormente, mientras el movimiento de protesta ya lleva dos meses y no muestra señales de calma.
Ataviados con cascos amarillos y máscaras negras, los opositores al gobierno salieron de una estación de metro en Causeway Bay, con algunas personas dirigiendo el tráfico y otros sosteniendo los torniquetes.
Las cámaras de vigilancia en la estación fueron cubiertas con cinta negra y paraguas mientras los manifestantes se dispersaban. También se levantaron barricadas improvisadas en el área, que alberga grandes almacenes de alta gama y restaurantes exclusivos.
Los manifestantes se movieron después de que la policía disparó gases lacrimógenos, algo habitual en las manifestaciones, en otro distrito carreteras de Hong Kong.
Más de 20 personas fueron detenidas por delitos como reunión ilegal y agresión tras choques entre autoridades y manifestantes que se prolongaron hasta bien entrada la noche, informó la policía de la ciudad.
Asimismo, pidió a la población resguardarse en sus casas y no salir por los disturbios.