Mookie Betts y David Price finalmente aparecieron con la franela de los Dodgers ayer, completando su viaje de Boston a Los Ángeles, donde esperan contribuir para que termine la sequía de títulos de Serie Mundial que se remonta a 1988.
Ninguno parecía desconcertado por el canje que se prolongó una semana antes de ser finalizado.
Betts describió la espera como un "momento divertido, estresante por momentos". Price indicó que irse de una franquicia histórica a otra era "algo especial".
"No fue tan fácil para nosotros", bromeó Andrew Friedman, el presidente de operaciones de los Dodgers. "Fue definitivamente una montaña rusa".
Betts, el Jugador Más Valioso de la Liga Americana en 2018, se une al actual MVP de la Nacional Cody Bellinger en el jardín. Price, ganador del Cy Young de la Liga Americana en 2012, se une en la rotación a Clayton Kershaw, quien ha conseguido tres veces ese galardón en el Viejo Circuito.
"Definitivamente será algo especial", indicó Betts. "Va a dar un espectáculo y haré lo posible para mantener el paso".
Friedman ve a los Dodgers del 2020 como "posiblemente el equipo más talentoso".
Este fue el primer cambio de equipo experimentado por Betts en su carrera. El jardinero derecho de 27 años fue elegido en el draft del 2011 por los Medias Rojas y debutó en las Grandes Ligas tres años después.
"Tengo grandes recuerdos en Boston, el más divertido en la Serie Mundial. Ese fue un gran capítulo en mi vida", comentó en alusión al título que ganaron los Medias Rojas en 2018 en el Dodger Stadium.
"Entiendo que es difícil para la nación de los Medias Rojas ver a Mookie irse", opinó Price.