Artistas callejeros, también conocidos como “botargueros”, representando a Superman, el Joker o Miguel, el protagonista de “Coco” y decenas de otras estatuas humanas y músicos se reunieron este jueves en el Centro Histórico de la Ciudad de México para recibir algunos alimentos para enfrentar la pandemia de coronavirus, COVID-19, que los ha dejado sin trabajo.
En la calle Violeta del centro capitalino se reunieron unos 60 artistas urbanos que trabajan en la famosa calle de Madero, que conduce al zócalo capitalino y que es tradicionalmente uno de los lugares más concurridos de la ciudad.
Según explicó a Efe Rubén Jiménez Barrios, representante de artistas urbanos, este jueves han recibido algunos alimentos para “paliar un poquito” la falta de ingresos.
El representante de la Asociación Legítima Cívica Comercial destacó que la entidad congrega unos 65 artistas urbanos entre estatus humanas, músicos o promotores culturales.
Este jueves recibieron arroz, fríjoles, lentejas, aceite, azúcar o papel higiénico, en un paquete que debería durar alrededor de una semana para una familia de dos a tres personas, explicó.
Indicó que este apoyo es momentáneo y deseó que las ayudas económicas lleguen también de las autoridades.
David Vázquez interpreta al Joker de Batman, también conocido como Guasón, casi todas las tardes en el centro de la capital. Explicó que está “muy preocupado” porque no se está trabajando “nada” y debe seguir pagando facturas y alimentarse.
Agregó que antes ganaba unos 350 pesos y se convirtió en estatua humana hace aproximadamente un año, destacando que le gusta “hacer reír” a la gente.
El Gobierno mexicano informó este jueves que evalúa extender el distanciamiento social hasta el próximo 30 de mayo para frenar la expansión del COVID-19, si bien falta la formalización de esta fecha del Consejo de Salubridad General.
Actualmente se cumple en México la llamada Jornada Nacional de Sana Distancia, que está al momento vigente hasta el 30 de mayo e implica la paralización de actividades no esenciales y la exhortación a las personas a quedarse en casa, si bien la cuarentena no es obligatoria para no afectar a millones de personas empleada en el trabajo informal.