Dinamarca se convirtió hoy en el primer país europeo que reabre las escuelas de los niveles básicos, después de un mes de mantener a la sociedad en confinamiento, con medidas para evitar los contagios de COVID-19 entre los menores.
El primer ministro Mette Frederiksen dio este día el mensaje de inicio de actividades, donde los nuevos casos positivos de coronavirus han sido escasos, pero una parte importante de la sociedad europea ha criticado estas acciones, informó BBC.
Para las escuelas se impusieron medidas de higiene que deberán seguir los niños, profesores y padres de familia, para evitar que el contagio se propague entre la comunidad, aunque mantienen la confianza de que los casos continúen disminuyendo.
Los niños o adolescentes, así como las profesoras, no portarán cubrebocas pero están obligados a tener un constante lavado de manos y a no acercarse demasiado, lo que algunos docentes han evaluado como una difícil tarea para lograr con los alumnos, informó el medio local Berlingske.
Otros países de la Unión Europea implementan aperturas en sus confinamientos aunque la medida de Dinamarca ha sido de las más significativas. Italia permitió la apertura de algunas tiendas pequeñas, como las librerías y España permitió la salida de trabajadores no esenciales, como algunos ejemplos.
En Dinamarca se han presentado casi siete mil casos de coronavirus, de los cuales 300 personas murieron y casi tres mil se han recuperado satisfactoriamente.